Cada cual tiene su alcohol. Yo tengo alcohol de sobra con existir. Borracho de sentirme, a veces voy a los tumbos y a veces camino bien. Si es hora de hacerlo, me encamino hacia la oficina, como todos. Si no es hora, voy hasta el río a mirar el río, como todos. Soy igual. Y detrás de eso, cielo mío, me abismo a las escondidas y tengo mi infinito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario